-Dos ocasiones encontró al acusado, teniendo relaciones sexuales en la calle, dentro de su vehículo.

Humberto Castillo Mercado

Acciones de “mala conducta”, de Diego Urik, antes del presunto feminicidio de Jessica González, fue lo que observó un testigo del campo de golf y empleado de seguridad en Altozano, sobre la actitud y proceder del joven acusado de la muerte de la joven maestra ocurrido el 21 de septiembre de 2020 en Morelia.

El testigo, de nombre, José Ulises, encontró al menos en dos ocasiones, a Diego Urik, teniendo relaciones sexuales en la calle Selva Negra, del mismo fraccionamiento donde este vivía, Bosque Monarca, en Altozano, al interior de su coche, un polo color gris.
La primera vez, fue entre febrero y marzo de 2020, con una chica Morena, la segunda, el 26 de agosto de 2020, con una chica de piel blanca, justo una área muy cercana a donde fue localizado el cuerpo sin vida de de Jessica, según varios de los testigos del caso, se trata de una zona boscosa, dentro del mismo fraccionamiento, pero sin vigilancia del personal de la zona residencial.
De acuerdo con el testigo qué acudió a la audiencia oral, este 29 de agosto, en la segunda vez que detectó el coche de Diego, estacionado al fondo de la calle, cerca de la media noche, le pidió que no podía estar ahí, y al aluzar el interior del vehiculo, se percató qué estaban desnudos y teniendo relaciones sexuales con la joven de tez blanca, al parecer la hoy víctima de feminicidio.
Al pedirle que se retirara del lugar, Diego aun demoró varios minutos, después arrancó a alta velocidad, salió del fraccionamiento y se llevó con el carro unos botes colocados en la puerta de salida de residentes frente a la caseta de vigilancia, cpuestos justamente para impedirle salir, lo cual no le importó al hoy acusado.
Ante lo ocurrido, el empleado de seguridad acudió al nomicilio de Diego, para reportarlo con su mamá, de nombre Anahí, quien dijo hablaría con su hijo.
La defensa del acusado, cuestionó al testigo sobre incosistencia de fechas, ya que inicialmente dijo, que la segunda vez que encontró a Diego teniendo relaciones sexuales en el asiento trasero de su coche fue en noviembre de 2020, luego rectificó, ante la insistencia de la Ministerio Público de la Fiscalia General del Estado.
Esta vez de la audiencia, Diego iba vestido con playera blanca de manga larga, marca armani, pants gris y tenis blancos, aun conserva su figura atlética, como lo han referido los testigos, hace dos años cuando ocurrieron los hechos.
Al abordar a los abogados de la defensa,ven un receso, reconocieron qué su fin, es desacreditar lo dicho por la gran lista de testigos qué o presentará la Fiscalía y apostarle al no feminicidio, ya que hay varias situaciones que no lo configuran, como el demostrar que el homicidio no ocurrió en un lugar público.