Desde la mañana de este 12 de mayo, restauradoras del INAH junto a voluntarios de la comunidad de Santa María Huiramangaro, se realizó el montaje de otra de las partes restauradas del retablo principal del Templo de Nuestra Señora de la Asunción, considerado uno de los templos de estilo plateresco más antiguos en Michoacán.
La altura del retablo es de 7.53 metros por 6.30 metros de ancho, los trabajos de restauración comenzaron desde el 2014, cuando se desmontó el retablo que entonces se encontraba pintado de blanco y dorado, para atender un desplome que presentaba el muro testero del templo; el 2017 se restauraron cuatro pinturas de caballete con la representación de los evangelistas Mateo, Marcos, Lucas y Juan, que sufrían diversos daños y un barnizado que las oscurecía.
En el área de la predela se descubrieron pinturas de los cuatro doctores de la Iglesia católica: San Jerónimo, San Ambrosio, San Gregorio Magno y San Agustín, junto a Santo Tomás de Aquino y San Buenaventura, que se encontraban cubiertas. El 2021 en una segunda etapa de intervención en el retablo principal, “se atendió el segundo cuerpo y el ático, además de cuatro esculturas con las representaciones de las vírgenes de la Asunción y de la Inmaculada, patrona de la comunidad, de Santa Martha y de María Magdalena”.
Este año el retablo con una manufactura previa al 19º Concilio Ecuménico, cónclave conocido como Concilio de Trento, por su sede en esa ciudad italiana entre 1545 y 1563, por fin ha lucido de su color, acompañado de sus pinturas originales.
Fuente: INAH