Patamban, Michoacán.- La gran fiesta de Patamban, una celebración llena de fe y tradición que se realiza cada último domingo de octubre en este pintoresco pueblo de Michoacán.

Desde las 10 de la mañana, los habitantes y visitantes se congregan para una misa especial frente a un templo en construcción, donde destaca una imponente imagen de Cristo Rey. Al mismo tiempo, las familias locales empiezan a elaborar detallados tapetes de aserrín y flores, que recorren las calles por más de 3 kilómetros. Estos tapetes, adornados con símbolos religiosos, animales y diseños alusivos a la región, son obra de la comunidad, que desde días antes recolecta flores y materiales naturales del cerro para crear estos coloridos mosaicos.

A las 3 de la tarde, inicia la procesión que avanza desde la Plaza de Patamban, cruzando sobre los tapetes, mientras los participantes realizan oraciones y hacen paradas en distintos puntos para pedir, en esta ocasión, por la paz mundial y en México. Esta procesión no solo muestra la devoción religiosa, sino que también refuerza la identidad cultural del pueblo.

Además de los tapetes, otra de las tradiciones es la elaboración de pan en hornos de piedra y leña. Este pan, que los habitantes preparan en sus casas, es otro de los elementos que reflejan la vida comunitaria de Patamban. Asimismo, la comunidad es conocida por su alfarería tradicional, en especial piezas con un esmalte verde que, aunque menos común, sigue siendo un legado de la región.

Fotos: Alfredo Soria/ACG.