“No se me da eso de tragar sapos”, afirmó al reiterar que no lo verán colaborando con el PAN.

-Humberto Castillo Mercado/ACG

Por dignidad y coherencia, el presidente del PRI asegura que ha solicitado una licencia al partido tricolor para no perjudicar la alianza del Frente Amplio por México, especialmente en el caso de Michoacán. No se sentará con la dirigencia del PAN para discutir las candidaturas de cara al 2024. Dejará temporalmente la dirección del partido a partir de mañana (sin especificar la duración) en manos del delegado nacional del PRI en Michoacán, Enrique Rojas.

“No pondré en riesgo la coalición en Michoacán con el PRI, PAN y PRD. No les daré el placer de verme en fotos con la dirigencia del PAN”, insistió en la rueda de prensa.

“No se me da eso de tragar sapos”, reiteró el priísta, explicando las razones de su separación de la dirigencia y destacando que los panistas son expertos en victimizarse.

“No me verán en una foto con la dirigencia del PAN, ni ahora ni después”.

Adriana Hernández, diputada local del PRI, representa la mejor opción para el Frente Amplio por México y sería altamente competitiva al Senado por el PRD después de su registro. Sin embargo, la priísta deberá renunciar a su militancia en el PRI para poder aspirar, según señaló Valencia.

“En la boleta electoral, no lo sé”, respondió cuando se le preguntó sobre la posibilidad de ser candidato en las elecciones de 2024. Tampoco especificó cuándo podría regresar, ya sea antes o después de los comicios.