Morelia, Michoacán.-Fué establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993, siguiendo la recomendación de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (Cumbre de la Tierra) en Río de Janeiro.
La falta de agua es uno de los desafíos más importantes que enfrentamos como resultado del cambio climático. El calentamiento global está afectando los patrones de lluvia en todo el mundo, lo que está llevando a sequías más frecuentes y prolongadas en algunas regiones.
Además, el deshielo de los glaciares y los casquetes polares también está disminuyendo los suministros de agua dulce en algunas partes del mundo.
Esto a su vez tiene un impacto en la agricultura, la producción de alimentos y la disponibilidad de agua potable para las comunidades.
Es importante tomar medidas para abordar estos desafíos, incluyendo la gestión sostenible de los recursos hídricos, la conservación de la biodiversidad y la adopción de prácticas agrícolas y de producción más sostenibles.
Fotos: Archivo ACG