Morelia, Michoacán.- La relación de las personas con su entorno urbano es una de las líneas de la educación ambiental, donde es importante una relación saludable y agradable en el entorno urbano.
El biólogo y académico Federico Hernández Valencia, de la facultad de biología de la Universidad Michoacana, nos explica que la educación ambiental es un tema que va más allá de la toma de conciencia, del cuidado de los bosques, el agua, reciclar, es un campo con muchas perspectivas como lo es por ejemplo el desplazamiento en la ciudad.

Morelia es una ciudad entre pequeña y mediana con problemas de transporte público y tránsito por la gran cantidad de carros que generan tráfico que a su vez ocasiona un estrés en las personas que no es saludable, además claro de la contaminación por la emisión de carbono. Federico comenta que así como es agradable estar en la naturaleza, lo debería de ser también en la ciudad.
“Las ciudades también tienen que ser aspectos agradables y precisamente la educación ambiental tiene que darse en muchos ámbitos, en todos los ámbitos, es decir, en la ciudad, en el campo, donde estés, es formar esa conciencia de tener un espacio agradable”.

En este sentido, Federico plantea que no es un ambiente sano el hecho de perder una gran cantidad de tiempo en el tráfico de la ciudad durante nuestros desplazamientos diario, así como tener un transporte público que sea digno y como para los usuarios que requieren del mismo a diario.
Platicando con Federico nos menciona que con la educación ambiental se busca tener una empatía entre todos y la colaboración entre todos, tomando conciencia de que lo que pasa al otro lado del planeta también nos afecta, pues todos compartimos el mismo mundo.
Las acciones de educación ambiental inician en lo individual y después a lo colectivo, pues es en la unidad desde el gobierno municipal, estatal, federal, la sociedad civil y la academia donde se logra hacer la diferencia.

A decir de Federico, la educación ambiental tiene como objetivo el generar personas críticas y reflexivas que están atentos a la situación que se vive en el carácter ambiental, social, política y cultural, ya que son muchas las perspectivas desde las cuales se deben abordar los problemas ambientales.
Al preguntarle al biólogo que es lo que hace falta para progresar en la educación ambiental, menciona que hace falta mucha unidad, explicando que entre los mismos educadores ambientales falta coordinación, además de políticas claras de educación ambiental a nivel estatal y federal que tengan planteamientos a mediano y largo plazo.

“No hay una continuidad, no hay políticas a 20, 30, 40 años (..) eso tiene que cambiar, tiene que haber ya políticas a mediano y largo plazo, independientemente del cambio de gobierno”
Finalmente, Federico hace la reflexión de que el día mundial de la educación ambiental, que se celebra el 26 de enero, no debería de ser relevante solo este día, ya que tiene que ser un trabajo constante de todos los días, pues no se debe de pensar en lo inmediato, sino a largo plazo además de ser un trabajo que debe de ser colectivo, para el beneficio de las generaciones venideras.
Fotos y video: Alfredo Soria/ACG.



