Héctor DIMAS
Nuevamente, el Club América se instaló en la instancia de Semifinales del futbol mexicano, al dejar fuera en los Cuartos de Final a un aguerrido León que no supo «capitalizar», como bien apuntó su Director Técnico, Nicolás Larcamón, en conferencia de prensa al término del partido en la cancha del Estadio Azteca, con un global de 4 goles por 2 a favor de los de Coapa.
Así, en un encuentro que parecía de «David contra Goliat” (América ocupó el lugar 1 en la tabla general del Torneo Apertura 2023, mientras que el León se clasificó como el octavo), resultó ser precisamente eso, un partido de trámite, y aunque con un conjunto de las Águilas a medio gas, le bastó y sólo corroboró que fue el mejor equipo del certamen a lo largo de las 17 jornadas.
En la historia de la Liga MX, el América es el equipo que más ocasiones ha llegado a la Liguilla por el título (tanto en torneos largos como cortos) y el que más finales ha disputado, con un total de 19. Por tal motivo, el Club América es la escuadra que en más ocasiones ha llegado a las Semifinales de Primera División.
Y no es para menos, con todo el aparato mediático que hay detrás, así como el capital que se le invierte a uno de los equipos que más pasión genera en el balompié azteca (a últimos años sólo superado por los equipos del norte del país, Tigres y Monterrey), tiene la cuasi obligación de conseguir el campeonato torneo tras torneo, y cuando el objetivo no se cumple sólo hay una palabra que todo lo describe: fracaso.
Ahora, en la antesala de la Final del Apertura 2023, las Águilas chocarán contra el bien ordenado equipo del Atlético de San Luis, comandados por el carioca Gustavo Leal, otrora aprendiz de André Jardine, actual DT del América, quienes dejaron en el camino al poderoso cuadro de Rayados de Monterrey, en un planteamiento categórico por parte del estratega brasileño en el Estadio BBVA.
De nueva cuenta, pareciera que está por repetirse la historia de «David contra Goliat», porque es aquí cuando el romanticismo más recalcitrante del futbol aparece en pro de los «desvalidos» que buscan hacerse un lugar en el Olimpo del futbol nacional, y qué forma más épica que derrotando a los «consagrados» y, por qué no decirlo, los «engreídos» Millonetas.