Morelia, Michoacán.– En el marco de la inauguración de Retrospección 2000-2025 en el Museo de Arte Contemporáneo Alfredo Zalce (MACAZ), el artista Ernesto Ríos conversó sobre los ejes que han guiado sus 25 años de trabajo. Reconocido por su enfoque transdisciplinario, Ríos explicó que su obra surge del diálogo constante entre arte, matemáticas, biología, arquitectura y tecnología. “Mi proceso siempre ha sido investigación y experimentación; es una exploración que no termina”, señaló.

A propósito de esta muestra, Ríos destacó que la revisión de su obra no solo reúne piezas creadas a lo largo de más de dos décadas, sino que también traza un mapa de su evolución personal y profesional. Para él, volver a ver estas obras juntas permite comprender cómo han cambiado sus procesos, sus materiales y su manera de interpretar fenómenos visuales y conceptuales.

El artista compartió que su metodología se basa en la reconfiguración de formas y sistemas complejos, traducidos en un lenguaje visual que combina lo técnico y lo intuitivo. Uno de los conceptos centrales es la fusión sistémica, inspirada en la lógica fractal. “Trabajo con fenómenos que van del universo a lo microscópico. Me interesa visualizar estructuras invisibles, tensiones, patrones que están allí pero no siempre percibimos”, comentó. Su uso de paletas monocromáticas —entre azules, grises y negros— responde a esta búsqueda de síntesis.

Ríos también habló sobre el papel del laberinto en su obra, una figura que considera un reflejo de la memoria y de la necesidad humana de encontrar sentido. “El laberinto es un modelo de pensamiento. Es una metáfora de cómo nos movemos entre lo racional y lo intuitivo”, expresó. Esta idea se refleja tanto en sus piezas bidimensionales como en esculturas, cerámicas y obras audiovisuales que integran rutas, constelaciones, circuitos y representaciones orgánicas. Para él, la exposición es una experiencia “no ortodoxa”, diseñada para que el público recorra los espacios con libertad.

Con más de 70 exposiciones colectivas e individuales en México y el extranjero, y con formación académica en la RMIT University de Melbourne y la New York Tech School of the Arts, Ríos destacó lo significativo que es volver al MACAZ después de casi dos décadas. “Regresar aquí es cerrar y abrir ciclos. Esta muestra no es un objeto, es una vivencia”, afirmó. Retrospección 2000-2025 reúne alrededor de 40 piezas y ya se encuentra abierta al público, invitando a los visitantes a participar activamente en la construcción del significado de la obra.
Fotos y video: Félix Madrigal / ACG.



